Investigaciones recientes indican que la melatonina, un ayudante para dormir ampliamente utilizado, podría afectar negativamente la salud intestinal, especialmente si se usa a largo plazo. Un estudio realizado en Brasil examinó los efectos de la suplementación con melatonina en ratones con diversos grados de disbiosis intestinal (un desequilibrio en las bacterias intestinales). Si bien se observaron algunos efectos antiinflamatorios a corto plazo, los investigadores encontraron evidencia significativa de que la melatonina promovió la inflamación intestinal con el tiempo.
Este hallazgo desafía la hipótesis anterior de que la melatonina podría beneficiar la salud intestinal. Los resultados del estudio sugieren que la ingesta regular de melatonina podría alterar el delicado equilibrio del microbioma intestinal, exacerbando potencialmente los problemas gastrointestinales existentes.
Por qué esto es importante:
El microbioma intestinal desempeña un papel crucial en la salud general, influyendo no sólo en la digestión sino también en la función cerebral, la inmunidad y la prevención de enfermedades. Con una mayor conciencia de esta conexión, mantener la salud intestinal es cada vez más importante. Teniendo en cuenta que aproximadamente la mitad de los estadounidenses experimentan falta de sueño, muchos dependen de la melatonina para obtener ayuda. Si este suplemento realmente daña la salud intestinal, es posible que millones de personas estén empeorando sus problemas digestivos sin saberlo.
La ciencia detrás de la suplementación
La melatonina es una hormona producida naturalmente por el cuerpo para regular los ciclos del sueño. Si bien la suplementación ha ganado popularidad en la última década, los expertos advierten contra su uso regular debido a posibles efectos secundarios. Esta nueva investigación añade otra preocupación: su potencial para alterar la salud intestinal. Las afecciones gastrointestinales como el síndrome del intestino irritable (SII) ya son prevalentes, especialmente entre las mujeres, lo que hace que la salud del microbioma sea aún más crítica.
Alternativas más seguras para dormir mejor:
Si depende de la melatonina, los expertos recomiendan explorar estrategias alternativas para mejorar el sueño:
- Límite de cafeína: Limite el consumo de cafeína y evítela más tarde durante el día para evitar alteraciones del sueño.
- Destete gradual: Si depende de la melatonina, reduzca lentamente la dosis mientras incorpora suplementos más seguros como el magnesio.
- Exposición a la luz solar: La luz del sol temprano en la mañana ayuda a regular el reloj interno del cuerpo, promoviendo un mejor horario de sueño.
- Santuario del sueño: Cree un dormitorio oscuro, tranquilo y ordenado para mejorar la calidad del sueño.
Conclusión:
Las primeras investigaciones sugieren que la melatonina puede no ser la ayuda para dormir beneficiosa para el intestino que alguna vez se pensó que era. Si bien se necesitan más estudios en humanos, los hallazgos plantean preocupaciones sobre el uso a largo plazo, especialmente para aquellos con problemas intestinales existentes. Priorizar las estrategias naturales de sueño y considerar alternativas más seguras puede ser el mejor enfoque tanto para el descanso como para la salud digestiva.
