Tu frecuencia cardíaca es un indicador fundamental de tu condición física y salud general. Si bien late de manera constante sin mucha atención consciente, realizar un seguimiento regular puede proporcionar información valiosa sobre su nivel de condición física y posibles problemas médicos subyacentes. Esta guía desglosa cómo es un ritmo cardíaco saludable, cómo medirlo y cuándo buscar asesoramiento profesional.
Frecuencia cardíaca en reposo: una señal de estar en forma
Su frecuencia cardíaca en reposo (la cantidad de latidos por minuto cuando está tranquilo) generalmente se encuentra entre 60 y 100 lpm para la mayoría de los adultos. Tasas más bajas a menudo significan una mejor aptitud cardiovascular. Los atletas altamente entrenados pueden incluso tener una frecuencia cardíaca en reposo de alrededor de 40 grados porque sus corazones son eficientes para bombear sangre con cada latido.
Sin embargo, la frecuencia cardíaca en reposo no está determinada únicamente por el estado físico. La edad, el tamaño corporal, el hábito de fumar, los medicamentos y las condiciones de salud existentes, como enfermedades cardíacas o desequilibrios de la tiroides, influyen. Incluso factores temporales como el estrés, la ansiedad o la posición del cuerpo pueden provocar fluctuaciones.
Si su frecuencia cardíaca en reposo cae constantemente fuera del rango normal (por encima de 100 lpm o por debajo de 60 lpm), consulte a un médico. Estas desviaciones pueden indicar un problema subyacente como anemia, enfermedad cardíaca o problemas de tiroides.
Medir tu frecuencia cardíaca
Comprobar su frecuencia cardíaca en reposo es sencillo. Puede usar un rastreador de ejercicios, un reloj inteligente o medirlo manualmente colocando dos dedos en su muñeca y contando los latidos durante 30 segundos, luego multiplicándolos por dos. El monitoreo regular (algunas veces por semana) ayuda a establecer lo que es normal para usted.
Frecuencia cardíaca máxima e intensidad del ejercicio
Su frecuencia cardíaca máxima (FCM) es lo más alto que su corazón puede latir durante un esfuerzo intenso. Normalmente se calcula restando tu edad a 220, pero esto es sólo una aproximación. Algunas personas naturalmente tienen MHR más altos o más bajos.
Conocer su MHR es fundamental para realizar un ejercicio seguro y eficaz. Durante la actividad moderada, intente alcanzar una frecuencia cardíaca objetivo entre 50 % y 85 % de su MHR. Esta zona maximiza los beneficios sin sobreesfuerzos.
Aquí tienes una guía rápida por edades:
| Edad | Zona objetivo (50-85% MHR) | Frecuencia cardíaca máxima |
|---|---|---|
| 20 | 100-170 lpm | 200 lpm |
| 30 | 65-162 lpm | 190 lpm |
| 40 | 90-153 lpm | 180 lpm |
| 50 | 85-145 lpm | 170 lpm |
| 60 | 80-136 lpm | 160 lpm |
| 70 | 75-128 lpm | 150 lpm |
Cuándo buscar atención médica
Si bien las fluctuaciones menores en la frecuencia cardíaca son normales, los cambios repentinos o drásticos requieren atención inmediata. Llame al 911 si experimenta:
- Una frecuencia cardíaca significativamente por encima o por debajo de lo normal en reposo
- Dolor en el pecho, dificultad para respirar, mareos o desmayos junto con cambios en el ritmo cardíaco
Estos síntomas podrían indicar un problema médico subyacente grave.
La frecuencia cardíaca en reposo normal para la mayoría de los adultos es de 60 a 100 lpm, y las frecuencias más bajas generalmente indican una mejor condición física. Factores como la edad, los medicamentos y el estrés también ayudan a determinar su frecuencia cardíaca en reposo. Controlar su frecuencia cardíaca durante el ejercicio, combinado con chequeos regulares, le garantiza ser proactivo con respecto a su salud cardiovascular.
